Al gobierno y al parlamento
CARTA ABIERTA DE LOS EX PRISIONEROS DE LA FACH
En la reciente propuesta sobre derechos humanos, el Sr. presidente
de la República manifestó su disposición
a otorgar beneficios a quienes cometieron “delitos”
dentro del período incluido entre el 11 de septiembre de
1973 y 10 de marzo de 1990. Al respecto, debemos clarificar que
los miembros de la Fuerza Aérea fuimos procesados y sentenciados
por hechos cometidos con anterioridad al período estipulado.
Sin embargo, como resultado de un decreto que declara al país
en estado de guerra interna a partir del 11 de septiembre del
73, fuimos sometidos a proceso por un tribunal en tiempo de guerra,
en la causa caratulada “Contra Bachelet y otros 1973”
que es ampliamente reconocida como ilegal por los métodos
que se usaron en su substanciación.
Los hechos por que se condena a oficiales y suboficiales de la
Fuerza Aérea constituyen una serie de acciones desarrolladas
antes del 11 de septiembre de 1973, en defensa de la Constitución
y del sistema democrático imperante en ese período
y persiguiendo como único objetivo el hacer abortar el
golpe militar que en ese momento se estaba articulando.
Por las razones antes mencionadas, no consideramos haber incurrido
en ningún “delito”, si se toma en cuenta que
al momento de estos hechos, estábamos juramentados a respetar
la Constitución y legislación vigente, en donde
claramente se establecía que el “generalísimo
de las Fuerzas Armadas era el presidente de la República”
a quien se le debía pleno respeto y obediencia por el cargo
que investía.
Por haber permanecido fieles a este mandato para todas las FF.AA.,
fallecieron tres camaradas nuestros y debimos soportar las humillaciones,
torturas y condenas de un tribunal militar en tiempo de guerra,
ordenado específicamente por los mandos de la Fuerza Aérea
e instruido por representantes de los autores del golpe militar.
Ellos son los mismos que destruyeron la democracia en nuestro
país y los responsables de los crímenes a que el
Sr. presidente hace referencia en esta propuesta.
En lo que respecta a la expresión de Su Excelencia “implementaremos
medidas para reparar jurídica y moralmente el nombre y
el honor de quienes fueron arbitrariamente encarcelados y procesados
por motivos políticos”, deseamos dejar claramente
establecido que en lo que a nosotros concierne, nunca hemos considerado
haber perdido nuestro honor militar. Todo lo contrario, nuestro
honor militar en este momento se encuentra no sólo intacto,
sino que mucho más fortalecido, por el simple hecho de
haber adoptado un camino que tanto entonces como ahora, estimamos
fue el correcto.
En lo que se refiere a nuestra reivindicación jurídica
y moral, requerimos en primer lugar no sólo que el gobierno
sino que también nuestra institución, la Fuerza
Aérea, públicamente “reconozca” como
ilegal e injusto el proceso a que fuimos sometidos y que además,
también comparta conjuntamente con el Estado chileno la
responsabilidad que le cabe, por los daños personales,
profesionales y materiales que nos ocasionó.
Los señores comandantes en jefe de las FF.AA. se niegan
a reconocer públicamente las responsabilidades institucionales
ante los crímenes cometidos a la población civil,
escudándose con el argumento de que “El perdón
es un acto personal”. Deseamos manifestar nuestro desacuerdo
con ese argumento. Las instituciones militares tienen y han tenido
por siempre el carácter de “permanentes” no
son “temporales” y sus comandantes en jefe son por
tanto, responsables ante el país de los hechos en que se
compromete la institución, aunque ellos mismos no hayan
tenido participación o responsabilidad directa en esos
hechos. La falta de ese reconocimiento, como consecuencia de una
lealtad mal entendida, ha significado que hasta hoy nuestras instituciones
armadas sean vilipendiadas por hechos del pasado y que además,
miembros de promociones que aún no nacían cuando
estos hechos se cometieron, injustamente hoy también sufran
el castigo que les cobra la sociedad.
Estimamos que es injusto por parte del gobierno el aceptar que,
por una parte se entreguen reconocimientos especiales a aquellos
militares que actuaron en contra de la ley otorgándoles
el beneficio de la “ley de amnistía” y además,
se les prometa la rebaja de penas en caso de colaborar con la
justicia. En cambio a aquellos como nosotros, que hemos pagado
en forma tan elevada nuestro compromiso con la Constitución,
las leyes y la defensa de nuestra democracia, aún se nos
mantengan las sentencias con que injustamente se nos castigó
y además, como resultado de que nuestras autoridades no
han sido capaces de determinar las responsabilidades e injusticias
cometidas, aún seamos considerados por muchos como traidores
a nuestra institución y a nuestra patria.
La falta de una clara disposición por parte de las autoridades
de nuestro país para subsanar los hechos que manifestamos,
nos ha obligado a recurrir primeramente a nuestros tribunales,
a través de la Corte Suprema, que se declaró incompetente
para revisar nuestro proceso y posteriormente, obligados por esta
falta de comprensión a nuestra causa, nos hemos visto en
la situación de tener que recurrir al tribunal interamericano
de DD.HH. de la OEA, para obtener la justicia que nuestra patria
nos niega, hecho que profundamente lamentamos pues hubiéramos
preferido que la justicia proviniera de las autoridades de nuestro
propio país.
Sin embargo y pese a los hechos antes manifestados, aún
tenemos la esperanza de que, en esta aparentemente última
instancia para solucionar las injusticias cometidas, las autoridades
y parlamentarios de nuestro país puedan, finalmente, otorgarnos
la reparación que hemos esperado a lo largo de tantos años.
Estimamos que este reconocimiento servirá también
de ejemplo para que las generaciones de militares que nos siguen,
sepan cumplir con el compromiso que adquieren al ingresar a los
institutos armados
EX-PRISIONEROS DE LA
FUERZA AEREA,
PROCESO “CONTRA BACHELET
Y OTROS 1973”
General de Brigada Aérea, Sergio Poblete Garcés
Capitán de Bandada, Jorge Silva Ortiz
Capitán de Bandada, Daniel Aycinena Fuentes
Sargento Segundo, Juan Ramírez Saavedra
Cabo Primero, Manuel Moya San Martín
Cabo Primero, Enrique Ibáñez Recabal
Cabo Primero, Ramón Pérez Escobedo
Cabo Segundo, Osvaldo Cortez Pardo
Cabo Segundo, Eduardo González
Cabo Segundo, José Ayala Alarcón
Cabo Segundo, Mario Arenas Fernández