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Planta de celulosa arrasó con peces y mariscos

Demonios asolaron
el Golfo de Arauco


Autor: ARNALDO PEREZ GUERRA
En Laraquete, Golfo de Arauco

 

DIA nublado en la caleta de pescadoresde Laraquete, Golfo de Arauco

En la caleta de Laraquete, Arauco, casi no hay peces ni mariscos debido a la contaminación de Horcones, la planta de Celulosa Arauco en operaciones desde 1972. El impacto ambiental y social ha sido feroz. Horcones produce más de 770 mil toneladas métricas anuales de pulpa blanqueada de eucaliptus y pino, que se utiliza en la fabricación de papeles de impresión, escritura e higiénicos. Ha emitido, a lo largo de décadas, toneladas de dioxinas y furanos, además de compuestos clorados, sustancias venenosas y tóxicas capaces de originar graves trastornos de salud. Los gases tóxicos, riles y desechos vertidos al aire, cursos de agua y al mar, afectan a los pueblos y localidades del Golfo de Arauco, principalmente a Laraquete y Arauco, que colindan con la planta de celulosa. Han aumentado las muertes por cáncer y otras enfermedades crónicas. También las neuralgias, insomnio, náuseas, irritaciones oculares y respiratorias, entre otras. Crece la incidencia de malformaciones y problemas neurológicos. Treinta y seis años de vertido de desechos y humo tóxico han significado un impacto profundo sobre la pesca, agricultura y salud de las personas.
En 2004 y 2005 hubo dos emergencias tras el derrame de veinte mil litros de trementina en el mar, que provocaron la muerte de mariscos y peces. El Servicio de Salud de Arauco prohibió la pesca en el radio de una milla. En Lota hubo pánico. Celulosa Arauco no avisó del derrame. Al servicio de urgencia del hospital de Lota llegaron 49 intoxicados. Pero otros cientos presentaron mareos, cefaleas, náuseas, vómitos, dolores estomacales, decaimiento y dificultades respiratorias. El municipio de Lota, el Sindicato de Buzos, Mariscadores y Pescadores Artesanales Lafkenche de caleta Barrio Pescador, de Arauco, y el Sindicato de Buzos y Mariscadores de Laraquete se querellaron invocando el artículo 136 de la ley de pesca y acuicultura.

Celulosa mortal

La planta Horcones fue construida por la Corfo y la empresa Parsons & Whittemore. Corfo adquirió las acciones de Parsons & Whittemore en 1972. En sus dos líneas utiliza el proceso de sulfato o kraft. La línea 1 produce pulpa de eucaliptus; mientras la línea 2, que opera desde 1991, genera pulpa de pino. La celulosa se destina casi toda a la exportación.
“En los derrames de 2004 y 2005 dijeron que por ‘problemas eléctricos’ las bombas que impulsan los riles desde las piscinas no funcionaron. Los riles se derramaron y los vertieron por un ducto directamente al mar. No tenían una política preventiva. Es un riesgo permanente”, dice Luis Ricardo Ibacache, presidente del Sindicato de Buzos y Mariscadores de Laraquete. Luego de años de denuncias y juicios, los pescadores están desesperanzados. No hay respuesta a sus demandas. “Nuestro abogado, Raúl Romero, no alegó y se perdió el juicio. En 2006 el dictamen había sido favorable para nosotros, pero Celco apeló. La Capitanía de Puerto de Coronel multó a la Celulosa en 7 millones. El Servicio de Salud la multó con 11 millones. Pero a los más afectados, los pescadores y buzos, no nos indemnizaron. Tras las protestas, hasta las puertas del municipio se han cerrado”, agrega Ibacache.
La contaminación en Laraquete no sólo es obra de Celulosa Arauco. “Hay también aserraderos, industrias químicas, etc. Todos descargan riles y hasta 2007, lo hacían en el río”, dice Ibacache. Señala que comenzaron a protestar cuando tras los derrames de trementina -según Celulosa Arauco, “un accidente”-, nadie se hizo responsable: “Murieron bancos completos de machuelo o navaja, eran bancos naturales y el único recurso que nos quedaba”, agrega. Hoy los buzos y pescadores tienen que navegar hasta la isla Santa María a extraer recursos, a treinta o cuarenta metros de profundidad en el mar. “El buzo está capacitado para bajar veinte metros. La mayoría termina en las cámaras de descompresión. Es un riego, pero no hay dónde pescar”, dice el buzo Juan Garrido.

Contaminación en el Golfo

Aunque los derrames de trementina no han vuelto a ocurrir, los episodios de contaminación y muerte de mariscos, peces y otras especies se suceden todos los años. Para los buzos y pescadores es insólito que tanto el Servicio de Salud Arauco, como la Gobernación Marítima, no consideren la presencia de compuestos organoclorados, lignina y otros tóxicos como un riesgo de contaminación de los productos del mar y de los seis mil habitantes de Laraquete.
La presencia de Celco y su planta Horcones ha producido un negativo impacto en la calidad de vida y el medioambiente. Olores pestilentes, deterioro de la agricultura, disminución, e incluso desaparición, de recursos marítimos. El alcalde de Arauco, Jaime Gayoso, se ha mostrado preocupado por la situación que afecta a los pescadores del golfo. Entrevistado por El Sur señaló que era muy posible que “los productos químicos utilizados para lavar la madera se hubieran infiltrado en las napas subterráneas”; y recordó que en los 70, cuando comenzó a funcionar la planta, “se detectó disminución de plancton en el golfo y numerosas especies desaparecieron”, lo que resintió la actividad económica de los pescadores.
Celco produce y vende celulosa desde 1979, tras la fusión de Industrias de Celulosa Arauco y Celulosa Constitución -creada en 1969-. Ambas empresas fueron adquiridas por Corfo en 1972, y privatizadas por la dictadura, adjudicándoselas a Copec, propietaria del 99,98 por ciento de las acciones. Es una de las mayores empresas forestales de Latinoamérica, fabrica celulosa kraft y produce madera aserrada y paneles. Posee plantaciones en Chile, Argentina y Uruguay. En Chile es propietaria de la mayor superficie de plantaciones forestales. El grupo Angelini -una de las tres fortunas más grandes del país- es dueño (...)

(Este artículo se publicó completo en “Punto Final” Nº 670, 5 de septiembre, 2008. Suscríbase a PF)